Bricol (II) 
Efecto
 

Es este un bricol de gran sensibilidad. No hay que dar primero a la bola, puesto que, como es lógico, entonces no sería bricol. Pero hay que tomar poca bola roja, o sea fina, para que luego el recorrido sea el idóneo. Tampoco aquí conviene dar ningún tipo de efecto, ya que la bola lo toma por si misma. O sea, y para seguir entendiéndonos, demos a la bola en Madrid, o en su sierra; es decir, algo más al Norte.

En esta posición se recomienda el bricol, ya que, si queremos hacerlo dando primero bola, al estar la roja pegada a la banda, nos exponemos a sufrir un remache y fallarla por varios kilómetros. Lo cual no quiere decir que no se puede conseguir dando primero bola; pero todo buen billarista debe intentar la carambola por el lugar y sitio más fácil.

Naturalmente, este ejemplo de bola nos sirve también para ir ejecutando sus variantes; o sea, cuando la roja está algo más arriba o más abajo, lo que nos obligará a tomar más o menos cantidad de bola roja.

¡Ah!, y nunca dejen de fijarse en los rombos que adornan la mesa. Son puntos de referencia que nos ayudarán a conocer el recorrido de las bolas. Sin ellos es imposible dominar el billar a tres bandas.