La primera batalla taques
contra tanques, tubo lugar en Viller–Bretonneux, Francia, el 24 de abril
de 1918, cuando tres tanques británicos, (2 hembras y 1 macho), se
enfrentaron a tres A7Vs. Dos de los enemigos estaban demasiado lejos para
ser atacados, pero el "macho" británico, un Mark IV abrió fuego
contra el A7V que iba en cabeza. Las tripulaciones de los tanques
británicos habían sido duramente gaseadas los días anteriores. Dos de las
tripulaciones de los “machos” Mark IV habían sido evacuadas y el resto
todavía sufría los efectos del gas mostaza. Esto hacia que los artilleros
británicos tuvieran complicado apuntar apropiadamente para acertar a sus
enemigos asi que fallaron el primer disparo, los A7Vs respondieron
rápidamente con las ametralladoras servidas con munición anti-blindado,
causando daños tanques británicos. Los tanques alemanes dañaron a los dos
tanques hembras, forzando a ambos a retirarse. El comandante
británico del macho, segundo teniente F. Mitchell, detuvo su tanque para
dar al artillero la oportunidad de hacer un disparo certero. Ambos
estuvieron encantados al ver al AV7 volcar, ya que sencillamente se había
venido abajo en un montículo empinado y dado la vuelta. El A7V "Nixe"
protagonista ese dia, fué abandonado por la tripulacion, mas tarde, trato
de ser recuperado por los alemanes, pero finalmente fue definitivamente
abandonado.
Esta fue la primera batalla,
tanque vs tanque de la historia, aunque, como no, como en todas las
historias, existen numerosas versiones de lo acontecido aquel día. La que
aquí se cuenta esta basada del libro Tanks of World War I and II de George
Forty.